La obsesión del PP con
Andalucía es destruir, y para ello no dudan en despreciar continuamente a los
ciudadanos que somos de esta tierra. Sus dirigentes nacionales nos tienen acostumbrados
al exabrupto y al insulto. Nos han tratado de indolentes, subsidiados,
analfabetos… y no sé cuántas cosas más. Hasta ahora han sido continuos los
insultos, pero siempre vinieron de dirigentes del PP de fuera de Andalucía.