A
siete meses de la elecciones municipales del próximo mayo, todos sabemos que se
ha producido un cambio en el pensamiento de los torremolinenses; nadie sabe qué
dirán las urnas en la próxima consulta, pero el otro día me decía una señora de
derechas de toda la vida, votante del PP y defensora de Pedro Fernández Montes:
“Yo
siempre he votado a Pedro, creo que ha hecho cosas buenas, pero ya se tiene que
ir. No porque esté más o menos mayor, sino porque se ha quedado sin ideas y no
escucha a nadie. La ley no debía permitir a un alcalde estar tantísimos años en
el sillón”