La barbarie de la segunda guerra
mundial llevó a la Organización de Naciones Unidas a aprobar la Declaración
Universal de Derechos Humanos en 1948. Se incluyen en esta declaración los
derechos a la seguridad de las personas contra el trato arbitrario de los
estados; derecho a la libertad de conciencia; derecho a un juicio justo;
derecho a la intimidad y a la familia; derechos políticos, económicos y los
derechos de igualdad ante la ley.
El 10 de diciembre de cada año se
celebra el Día de los Derechos Humanos,
proclamando sus principios como “un ideal común para todos los pueblos y
naciones”.
El art. 25 de la Declaración Universal de Derechos Humanos, dice
que “Toda persona tiene derecho a un
nivel de vida adecuado que le asegure, así como a su familia, la salud y el
bienestar, y en especial la alimentación, el vestido, la vivienda, la
asistencia médica y los servicios sociales necesarios; tiene asimismo derecho a
los seguros en caso de desempleo, enfermedad, invalidez, viudez, vejez y otros
casos de pérdida de sus medios de subsistencia por circunstancias
independientes de su voluntad.”
Según Amnistía Internacional, hoy día, después de 70 años de la Declaración Universal de Derechos Humanos, más de 180 países vulneran esos Derechos, entre los países incumplidores se encuentran China y Estados Unidos. También en España, hay
serias amenazas, cuando no claros incumplimientos de la libertad de expresión,
derechos económicos, sociales y culturales, derecho a la salud, derecho a la
vivienda…
Los derechos a la verdad, la
justicia y la reparación de las víctimas de crímenes de derecho internacional
cometidos durante la Guerra Civil y el franquismo siguen siendo denegados en España,
que ni investiga ni colabora con investigaciones llevadas a cabo por otros
países. La ONU ha condenado a España, entre otros incumplimientos, por
violación de derechos humanos en desahucios sin garantizar el derecho a la
vivienda a personas con pocos recursos.
Aunque el desahucio venga por una
orden judicial legal, la ONU afirma que si no se proporcionar una alternativa habitacional,
es una violación del derecho a una vivienda adecuada y por tanto una
vulneración de derechos humanos.
Desde que gobierna Mariano Rajoy,
son ya incontables las condenas de Naciones Unidas a España por vulneración de Derechos Humanos en
políticas sociales.
