Los salarios en España han tenido un
deterioro en los últimos años que podemos cuantificar en una reducción de más
de 30.000 millones de euros desde 2008; al mismo tiempo las ganancias de bancos
y grandes empresas crecen considerablemente.
El rescate bancario (el que no iba a
costar ni un euro al erario público) nos costará a los españoles más de 50.000
millones de euros, y se han recortado las pensiones, cuyas subidas no suponen
ni el 10 % de la inflación interanual. Se está aumentando la desigualdad y la
pobreza. Un directivo del Ibex gana casi cien veces más que un empleado medio. Hay más de 2,5 millones de personas en situación
de pobreza severa, y 10 millones en riesgo de pobreza.
Los servicios básicos, sanidad, educación,
servicios sociales y ayuda a la dependencia, siguen deteriorándose, sin que los presupuesto del estado
recientemente aprobados por el PP, hayan establecido ninguna medida de
corrección sobre este deterioro.
Después de 10 años de Ley de Dependencia,
según el presidente de la Asociación Estatal de Directores y Gerentes en
servicios sociales José Manuel Ramírez Navarro "En España fallecen cada
día ciento once personas dependientes sin recibir el servicio al que tienen
derecho".
Y la corrupción se ha instalado en las más
altas instituciones del Estado, ¿hasta cuándo soportaran los ciudadanos esta
situación?
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