Dice el diccionario de la
Real Academia Española que "estafar" es Cometer alguno de los delitos que se caracterizan por el lucro como fin
y el engaño o abuso de confianza como medio. Pues bien, con esa definición
podemos asegurar con total rotundidad que el Ayuntamiento de Torremolinos, presidido
por Pedro Fernández Montes (PP) estafa a vecinos y turistas.
El ayuntamiento tiene
vigente una Ordenanza Fiscal, en concreto la nº 36, que se puede consultar aquí,
que establece un precio público de 30 céntimos para los ascensores que unen la playa
con el centro del de la ciudad.
Pero el ayuntamiento
incumple la ordenanza y cobra 50 céntimos, un 67% más. ¿Por qué esta estafa?
Sin embargo no coloca ningún
cartel que, fácimente visible como éste, diga que es gratis para niños hasta 4
años, mayores de 70 y discapacitados físicos. ¿Para quién gobierna este alcalde?
¿Qué fuerza moral tiene un ayuntamiento estafador para exigir a los vecinos que cumplan las ordenanzas municipales?
Por lo menos que escriban bien el cartel..."shedule" jajaaj
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